Hoy desperté con el sabor de tus labios en los míos, con tu aroma que se apoderó del mío y con las manos recordando su raudo paso por tus caderas, tu cintura y tu cuello. Hoy desperté con sabor a vos...con ganas de seguir con ganas, de amarte sin empacharme jamás de tu miel y de perderme nuevamente en tus ojos, mientras mis dedos recorren tu pelo...Y con mi silencio decirte las cosas que tanto deseás escuchar...
Hoy desperté y más que nunca...te sentí a mi lado.
1 comentario:
querido excelente post, miechi con cuantas ganas me dieron ganas jajaja, saludos
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